Las copiosas precipitaciones registradas en las últimas cuarenta y ocho horas  en la vertiente Sur de Gran Canaria han conseguido elevar los niveles de las presas de forma espectacular, haciendo rebosar  La Sorrueda y poniendo al borde de su cota  máxima  a  las de Chira y Parralillo. Esta última se esperaba que rebosara en las primeras horas de  esta jornada.

El registro más importantes de cuanto se anotaron en zonas de medianías se alcanzó en la Caldera de Tirajana, más concretamente en Tunte, donde la lluvia durante los dos últimos días sumó 116 litros, según el presidente de la Heredad de Aguas de Tirajana, Vicente Santana. Esto hizo que ayer al mediodía la presa deChira elevara  su nivel en algo más de 1,10 metros y se colocara a tan sólo 2,10 metros de su capacidad total.

Pero sin duda el caudal más espectacular se anotó en la presa de Soria. En este punto de la isla ayer  llovió 42 litros, lo cual hizo que se elevara en 5 metros el nivel de la presa más grande de la isla, que ayer en horas de la tarde registraba una altura de 73 metros, a menos de 50 metros de  la cota más alta.

Otra imagen destacada de la lluvia la ofreció la presa del Parralillo, ubicada en la cuenca más elevada de La Aldea de San Nicolás, a la que le estaban entrando unas 1.000 azadas de agua. Con este volumen se espera que hoy se produzca su reboso, por cuanto ayer a las 15 horas  le faltaba poco más de  un metro para alcanzar su nivel más elevado.

Tanto en La Aldea, donde las lluvias alcanzaron un registro  de 35 litros, como en el resto la vertiente sur y suroeste, el agua no ha causado destrozos significativos, salvo los típicos desprendimientos y cortes de algunas carreteras, que fueron solventándose con el transcurrir de las horas tras la mejora de las condiciones meteorológicas.

En la cuenca de las Tirajanas, el embalse de La Sorrueda, que ya había llegado al límite desde hace días, aumentó su excedente de caudal al Barranco de Tirajana, arrasando por carreteras construidas para la extracción de áridos o para acceder a las fincas ubicadas en la cuenca. La presa, propiedad  de la Heredad de Sardina del Sur  y del Condado de la Vega Grande, almacena  tres millones de metros cúbicos.

Mucha y alarmante

Las fuertes lluvias caídas ayer en la cuenca de las presas asombró a todos por su cantidad y persistencia. Junto a la alegría de ver a más del noventa por ciento de los embalses rebosando a estas alturas del año, llegó también el susto y la angustia, sobre todo en zonas como Ayagaures, donde algunas personas fueron rescatadas con un tractor, Barranco de Tirajana, donde se han abierto carreteras en el mismo cauce y en la vía de acceso a Palmitos Park, que tampoco  necesita mucha lluvia para verse cortada. El espectáculo del agua pasando por la zona de Doctoral, como se puede ver en la foto superior, concitó durante la jornada de ayer la presencia cientos de habitantes de la zona costera.